Transformación en el diagnóstico y tratamiento del cáncer con Medicina de precisión
En los últimos años, hemos sido testigos de cómo la medicina de precisión ha revolucionado radicalmente nuestra capacidad para diagnosticar y tratar el cáncer. Gracias a estas innovaciones, la tasa de supervivencia de los pacientes con cáncer se ha duplicado en los últimos 40 años. Este avance se debe al uso de modernas técnicas de imagen, fármacos innovadores como las terapias dirigidas y la inmunoterapia, y la integración de información molecular sobre el tumor en un enfoque holístico de la enfermedad.
Delia Cortés Guiral, directora del Instituto Viamed de Cirugía Oncológica Avanzada (IVOQA), destaca la importancia de la cirugía en el tratamiento del cáncer. La cirugía ha sido siempre la piedra angular del tratamiento oncológico, enfocándose en la máxima resección del tejido tumoral con el menor impacto posible en los tejidos sanos circundantes. La medicina de precisión ha introducido herramientas y técnicas mínimamente invasivas que no solo reducen las complicaciones postoperatorias, sino que también presentan un enfoque terapéutico eficaz, menos dañino y que preserva la calidad de vida del paciente.
Avances en el tratamiento de cánceres avanzados y metastásicos
Para ciertos cánceres avanzados y metastásicos, ahora podemos ofrecer intervenciones con técnicas altamente especializadas que antes solo contaban con tratamientos paliativos. Por ejemplo, la electroporación irreversible (IRE) se ha convertido en una alternativa combinada a la radiología intervencionista y la cirugía, mejorando la supervivencia de pacientes con cáncer de páncreas irresecable. La hemoembolización del hígado ha mostrado resultados prometedores en la reducción de tumores hepáticos y metástasis hepáticas. La ablación percutánea de tumores es un procedimiento mínimamente invasivo que produce menos complicaciones y permite una recuperación más rápida en varios órganos, incluyendo el hígado, los pulmones, los riñones, el páncreas, los huesos, los tejidos blandos y la glándula tiroides.
Innovaciones en el tratamiento de la carcinomatosis peritoneal
La carcinomatosis peritoneal, anteriormente considerada una fase terminal de la enfermedad, ha visto un cambio significativo en su pronóstico gracias a nuevas técnicas quirúrgicas y quimioterapéuticas. Estas incluyen la PIPAC (quimioterapia en aerosol intraperitoneal a presión), la cirugía citorreductora y peritonectomía, y la HIPEC (quimioterapia intraperitoneal hipertérmica), que pueden realizarse mediante acceso laparoscópico y abierto. La ePIPAC, que incorpora la adición de precipitación electrostática, también ha mostrado ser efectiva en retardar la progresión de la enfermedad, reducir síntomas, prolongar la vida e incluso lograr la resección completa del tumor.
Un enfoque personalizado de la terapia intraperitoneal, basado en los resultados de paneles moleculares completos de metástasis peritoneales o la generación de organoides, permite probar tratamientos con mayor probabilidad de éxito tanto a nivel sistémico como intraperitoneal.
Desafíos y necesidades para la implementación de nuevas tecnologías
Sin embargo, la aplicación de estas avanzadas tecnologías requiere una infraestructura bien desarrollada y especialistas experimentados que se mantengan en formación continua. El objetivo es garantizar que cada paciente tenga acceso a todas las opciones terapéuticas y quirúrgicas disponibles para su enfermedad, proporcionando un tratamiento más efectivo y personalizado.
En resumen, la medicina de precisión no solo ha transformado nuestra capacidad para tratar el cáncer, sino que también ha mejorado significativamente la calidad de vida y las tasas de supervivencia de los pacientes. Con el continuo desarrollo y la implementación de estas innovaciones, el futuro del tratamiento del cáncer parece prometedor.