Nuestro sitio web utiliza cookies para mejorar y personalizar su experiencia y para mostrar anuncios (si los hay). Nuestro sitio web también puede incluir cookies de terceros como Google Adsense, Google Analytics, Youtube. Al usar el sitio web, usted consiente el uso de cookies. Hemos actualizado nuestra Política de Privacidad. Por favor, haga clic en el botón para consultar nuestra Política de Privacidad.

Pemex eleva importaciones de gasolina al máximo de 2024

https://mexicanfibers.com/wp-content/uploads/2021/05/pemex.jpg

En mayo de 2025, Petróleos Mexicanos (Pemex) registró el mayor volumen de importaciones de gasolina en lo que va del año, con un total de 351,000 barriles diarios. Este nivel solo es comparable con el observado en diciembre de 2024, cuando las importaciones alcanzaron los 409,000 barriles diarios. La cifra representa un aumento del 5 % respecto a abril, aunque todavía se encuentra un 14 % por debajo del volumen registrado en mayo del año anterior.

El valor de estas importaciones también fue significativo. Pemex desembolsó cerca de 937 millones de dólares para abastecerse de gasolina en el extranjero, lo que supuso un incremento mensual del 4 %.

Continuidad de la dependencia enérgica

A pesar de los esfuerzos del gobierno mexicano por lograr la autosuficiencia energética, las importaciones continúan cubriendo más de la mitad del consumo nacional de gasolina, que ronda los 800,000 barriles diarios. El objetivo de reducir esta dependencia mediante la modernización de las refinerías existentes y la construcción de nuevas plantas, como la refinería Olmeca en Dos Bocas, aún está lejos de concretarse.

De manera simultánea, la generación de gasolina en el país continúa siendo escasa. En mayo, las refinerías de México solo produjeron 327,500 barriles al día, registrando un descenso mensual del 5 %. Esta reducción en la producción ha llevado a Pemex a aumentar sus adquisiciones internacionales para cubrir la demanda interna.

Factores operativos detrás del aumento

Diversas causas justifican el aumento de las importaciones. Las refinerías en México han tenido que lidiar con interrupciones técnicas, mantenimientos planificados y averías en equipos esenciales que han reducido su eficiencia operativa. Asimismo, aunque se ha destinado una cantidad considerable de recursos a proyectos como las coquizadoras de Tula y Salina Cruz, estas iniciativas todavía no están completadas o no funcionan a su capacidad máxima.

Esta circunstancia ha creado una divergencia fundamental entre la producción local y el consumo, que Pemex busca compensar mediante importaciones cada vez más caras debido a la variabilidad en los precios de los combustibles a nivel internacional.

Impacto en el presupuesto gubernamental y la tasa de cambio

El aumento de las compras externas también influye en las finanzas del Estado. Las adquisiciones en dólares ejercen presión sobre las reservas internacionales de la nación y pueden incidir en el tipo de cambio, particularmente cuando dichas compras se concentran en lapsos breves o se presentan al mismo tiempo con inestabilidad financiera mundial.

Asimismo, la transferencia de estos costos a lo largo de toda la cadena de suministro puede afectar los precios que pagan los consumidores, aunque Pemex ha procurado conservar cierta estabilidad en los costos finales del combustible.

Participación del sector privado

Aunque Pemex concentra la mayor parte de las importaciones de gasolina, empresas privadas también participan activamente en este mercado. Algunas compañías han recurrido incluso a proveedores en Asia cuando las condiciones en Estados Unidos —principal socio comercial en materia energética— no han sido favorables. Esta dinámica refleja un mercado de combustibles diversificado, en el que conviven operadores públicos y privados frente a un mismo desafío: abastecer de manera continua al país.

Una señal de los retos que persisten

El incremento en las importaciones de gasolina en mayo destaca las limitaciones actuales del sistema de refinación en México. Aunque existen planes para alcanzar la autosuficiencia energética, la producción nacional aún no puede cubrir la demanda interna, y la dependencia de los mercados internacionales continúa siendo una realidad.

El desafío para Pemex y las autoridades energéticas consistirá en fortalecer los proyectos actuales, optimizar la eficiencia de las refinerías en operación y asegurar que las nuevas instalaciones alcancen sus objetivos de producción. De esta manera, se podrá disminuir la dependencia de importaciones, que resultan cada vez más caras, y progresar hacia un modelo energético más sostenible y autosuficiente para la nación.

Por Otilia Adame Luevano

Deja una respuesta

También te puede gustar